Para las festividades de Pentecostes, en Junio de 2003, con motivo de los 1700 años del aniversario del martirio de Devota, Sus Altezas Serenísimas el Príncipe Rainiero III y el Príncipe Alberto II acudieron al lugar de Mariana donde Devota fue martirizada.
Con numerosas personalidades del Principado, algunos penitentes monegascos y unos doscientos peregrinos venidos especialmente del Principado de Mónaco, el Príncipe Rainiero y el Príncipe Alberto tomaron parte, entre otras manifestaciones, a una misa en la Canónica y a la procesión que le siguió.